listas: los mejores discos internacionales de la década

hablar de my dark places sin recurrir a la leyenda. defender este regreso de los infiernos por lo que es y no por lo que carga a sus espaldas. hacerse fan del treacy actual y no necesariamente por lo que fue el treacy de los ochenta. tareas que no debieran ser complicadas, por todo lo bueno que guarda este retorno, pero que se hacen imposibles por culpa de la exposición a que se ha visto sometida la figura de su máximo responsable.

y, centrados en su escucha, conscientes de que lo importante aquí no son las biografías sino la música, my dark places mantiene intactas todas sus virtudes. es un álbum brillante, desquiciado y desordenado, que recupera la esencia más punk de los primeros tv personalities para adaptarla a la dispersa personalidad de dan treacy. recorre los géneros desmigándolos hasta hacerlos suyos. interpreta con la dejadez de quien no hace las cosas por estándares, relega la estética frente al talento y utiliza la música como vehículo de exorcismo, con la titánica fuerza que da el no tener nada que perder.

y al final no sé si este álbum es irónico o descarnado, si es lícito atender a lo que dan treacy expone en él sin estremecerse, pero el ejercicio de abstracción que hay que hacer para evitar sentir escalofríos con su escucha te deja tan exhausto que no quedan fuerzar para ser críticos con él. y se cuela hasta dentro a pesar de sus imperfecciones, heterodoxias e idas de olla. y con todas ellas se dibuja una, otra, obra maestra de los television personalities. m