conciertos: southpop isla cristina (11 y 12/09/09), primera jornada

esta mañana las calles de sevilla han amanecido mojadas por la lluvia. no me extraña, ya que el domingo, con la barbacoa del southpop islacristina se daba oficialmente por terminado el verano. y con qué guinda, porque este pequeño gran festival se ha consolidado en su segunda edición como uno de los más reivindicables del periodo estival. por su cartel, por la ubicación y por la fantástica organización.

un festival tan cómodo que casi no parece un festival, en un recinto ideal, y con una organización que ha cuidado detalles como el de acordar unos precios asequibles de las habitaciones del hotel de 4 estrellas situado a escasos metros del recinto donde se celebra, organizar sesiones de la antonia pincha y duckula dj en la piscina del mismo, ofrecer autobuses gratuitos desde sevilla, organizar una barbacoa de despedida y cuidar el sonido para que todo fuera perfecto.

(matias al frente de cats on fire, this charming man)

además, el cartel, lo más importante al fin y al cabo, no ha podido estar estar mejor seleccionado para el tipo de festival que es. cuadrando calidad con tirón para conseguir un sold out realmente merecido.

y la encargada de dar el pistoletazo de salida se convirtió en mi primera sorpresa del viernes. anni b sweet no cuadra con mis gustos actuales. el neofolk americano no está entre mis preferencias, y la sobreexposición mediática del género a la que nos ha llevado la figura de russian red tampoco ayuda mucho. pero la malagueña en directo es mucho menos ruido y me atrevo a decir que más nueces. tiene una banda que arriesga instrumentalmente y no va a lo obvio (¿me cuelo si digo que por momentos se iban hasta el emocore?) y ella cambia pose por sencillez. esperemos que no se la trague la ola que han generado otras.

tras ella llegó el grupo que esperaba, el que me tenía primero contando días en sevilla y horas ya desde que llegué a isla cristina. y lo de cats on fire fue incluso más de lo que imaginaba. desde el arranque con born again christian hasta el magnífico cierre con tears in your cup no paré de bailar las canciones de los finlandeses. liderados por el extraño cruce entre morrissey (en lo musical) y jarvis cocker y ian curtis (en lo estético) que es matias björkas, fueron lo mejor de la primera jornada. haciendo más directas las canciones de su segundo álbum y escogiendo lo mejor de the province complains bordaron una actuación que se queda para siempre en mi recuerdo.

(ana y dabeef defendiendo su romancero particular)

de la bien querida lo mejor que puedo decir es que tiene grandes temas. pero ni en disco me llega como lo hizo con la maqueta, ni su directo sirvió para acortar las distancias creadas por romancero. sonido pésimo y una voz que parecía a remolque de unas canciones que merecían mucho más que una puesta en escena que, aunque intenta convencer, se pierde en eso, en el intento. me quedo con bendita y una 9.6 despojada del disfraz techno y casi que me olvido del resto.

con piano magic no comulgo especialmente, pero el viernes todos nos quitamos el sombrero ante el sonido que desplegaron, algo fuera de lo común, fuera de lo explicable. su música, como de unos joy division épicos o unos u2 primerizos y con la brújula cerca para no perder el norte, no pudo estar mejor interpretada. mirar al público que tenías alrededor era toparse con decenas de bocas abiertas y aplausos al final de cada tema. chapeau.
(those dancing days, the teenage riots at the disco)

y, para finalizar, las suecas those dancing days pusieron a todo el público a bailar nada más salir al escenario, a por todas con el aura de hype de su album de debut. el problema es que el sonido fue demasiado plano y a medida que iban pasando las canciones la cosa se iba haciendo excesivamente monótona hasta conseguir justo lo contrario del efecto inicial, crear indiferencia.

finalmente, la sesión de duckula dj ya me tocó disfrutarla desde mi habitación de hotel, cuyo balcón lindaba con el recinto y la música se colaba sin pedir permiso, y solo me atrevo a decir que cantando el estribillo de con toda la marcha me venció el sueño hasta el día siguiente.