canciones: chauferette, sr. chinarro

supongo que la música va de esto. de algo tan estúpido como sentirse especial simplemente por vivir en la misma sevilla que aparece implícita en las canciones de antonio luque. de haber pasado por las mismas calles de farolillo rojo, de haberme subido al ring ring de la línea nocturna que hace ya años que no es naranja, de los jueves en la calle feria, del escalextric de la alfalfa, de la ronda de los capuchinos, del betis, de la madrugá, de rochelambert y la cruz del campo. de haber coincidido en bares de copas y plazas de litronas. de haber podido saludarle y no hacerlo por pudor. de sentir cerca a lo más parecido a un ídolo que tuve entre los veinte años de mi primer concierto chinarro y los treinta de su último disco con acuarela.

y después están las doce citas. once en sevilla y una en extremadura. el lago de la cartuja antes de compañía malpaso, interplanet, fun club con lupa, sala gen con un grupo de cadiz de nombre futbolístico, teatro central con migala, el palenque con sus padres, otra vez el central, nocturama y de nuevo nocturama, contempopránea, auditorio de cartuja con midi puro y territorios. y el día en el que volamos, de asturias a sevilla, en el mismo avión. él con la guitarra como equipaje de mano y yo con sus canciones en el ipod.

chauferette me trae todo esto a la cabeza, ahora mientras escribo y esta mañana camino del trabajo, cuando dejaba pasar coches y autobuses burdeos junto a mí, esperando al que tenía que recogerme en un semáforo de la avenida felipe ii. chauferette es el nexo de unión entre los superhéroes de barrio de kiko veneno y el surrealismo chinarro. una canción que habla de sevilla, de noches, calles y conductores de tussam que te ayudan a volar. una canción que quisiera comprender mejor de lo que lo consigo porque presiento que habla de cosas que me han ocurrido, entre los veinte años de la sevilla universal y los treinta de la piña perdida. una canción que pertenece a un disco que, como otros tres o cuatro más, han trascendido lo musical para colarse en lo personal, mezclándose hasta que ya no sabes quién es el músico y quién el oyente. quién es luque, ni quién soy yo en la sevilla del porqué.