internet cambia tu concepción acerca de lo que es comprar música. lo hace todo vendible, absolutamente todo. solo hay que estar de acuerdo en el precio, aceptar que cada artículo acarrea unos gastos por correos y confiar, especialmente en la segunda mano, en la credibilidad del vendedor.
pero de otra forma no se podría entender que uno de los últimos vinilos que han entrado en mi casa sea la primera edición brasileña del tropicalia, ou panis et circenses, de 1968, aún en mono. o que haya podido conseguir el sound affects de the jam por menos de nueve euros, gastos de envío incluidos. una tienda virtual de cajones infinitos con toda la discografía editada en el mundo, de la que mis últimas adquisiciones han sido los dos ya citados, el debut de the pains of being pure at heart, publicado este enero por slumberland, el tremolo ep de my bloody valentine y mummy you're not watching me de tv personalities en la edición de whaam!, el sello que dan treacy, acordándose de liechtenstein y su pintura a la hora de elegir el título, creó para editar su música.
aunque, ya que nada es del todo blanco o negro, el problema aquí surge porque al abrirse tanto el mercado, por mucho que gastes, por más que tengas, por más chollos que encuentres, siempre queda por conseguir y nunca tienes suficiente. todo un mundo incompleto de primeras ediciones, near mints-, subastas y páginas webs que se convierten en una pequeña obsesión, te ocupan el día, la noche y los sueños, y se convierten en actor protagonista de tu día a día encarnado en avisos de finalización de subastas, búsquedas guardadas y esperas nerviosas al cartero. un laberinto del que no encuentras la salida porque lo que buscas no está fuera de él. donde el minotauro es tu vendedor favorito.
29/3/09
listas: 5 vinilos de ayer y hoy, las últimas compras de manolo
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manolodominguez
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No podría haberlo explicado mejor..
ResponderEliminarAyer estuve de compras por este nuestro Madrid y ... agh ... qué asquito de tiendas físicas. Cuando llegué a casa compré mucho de lo que había visto pero a mitad de la clavada. Ahora a esperar que llegue pronto y bien o, simplemente, que llegue, que parece que hay una mano larga en las dependencias de Correos de mi zona ...
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