recordando discos: os mutantes, os mutantes 1968

estamos ya muy acostumbrados a ver nombres anglosajones al citar a los grupos y discos más representativos de la música. se podría creer a pies juntillas que el inglés es el idioma oficial del pop y el rock. pero eso sería una gran injusticia, provocada por un lado por el sentimiento de inferioridad de unos y por la privilegiada situación que siempre ha tenido la prensa especializada, tanto británica como norteamericana, dentro de la escena musical por el otro.

por eso me apetece aprovechar esta sección de la página para ir introduciendo discos no surgidos de ninguno de los dos dioses del pop-rock. discos capaces de mirarles de tú a tú a cualquiera que se le ponga delante. y especialmente quería citar el álbum de debut del trío brasileño os mutantes.

porque este lp, junto al igual de fundamental tropicalia. ou panis et circensis, firma el nacimiento en brasil del tropicalismo. de una música que bebe de la psicodelia británica, de las raices brasileñas, de la bossa o incluso del pop francófono para lograr sonar innovadores, radicales y sorprendentes. un sonido que se ha visto influenciado por el sgt. peppers de igual manera que por sus compatriotas getz, gilberto o jobim y que tiene, gracias a ello una base especialmente sólida sobre la que edificarse.

pero esa mezcla, que mal dirigida podría llevar inevitablemente al pastiche sonoro, en las manos de os mutantes se convirtió en una explosión de tremendas canciones, desde el panis et circenses (que también abría y titulaba el ya citado lp compartido por veloso, gil, costa, leâo y los propios os mutantes) hasta la adictiva minha menina, todo en el debut del trío formado por rita lee, sergio dias y arnaldo baptista suena hipnótico,casi lisérgico y tan inspirado que junto a la colaboración surgida gracias al movimiento tropicalista, con nombres del nivel de caetano veloso, gilberto gil o jorge ben, conseguía elevar a la condición de clásico este álbum. tanto que obliga a plantearse qué hubiera ocurrido con esta obra magna de haber sido publicada en otro país.

después, la continuación (mutantes, 1969) mantiene influencias y el trío sigue siendo igual de recomendable, hasta que en los setenta derivaran hacia otros sonidos más cercanos al rock progresivo que, al menos para mí, pierden buena parte de su interés. pero, para entonces, os mutantes ya habían hecho historia, aunque aún no se les hubiera reconocido lo suficiente.