brutal primera noche (segunda si nos ponemos quisquillosos) de la primera edición del primavera club en madrid.
el ambiente empezó a caldearse en la sala joy eslava con unos lovvers algo perdidos en el tiempo y en el espacio, también en el sonido, pero que a base de ruido más que de actitud dieron muestras de lo que se esconde tras estos cuatro británicos larguiruchos. creo que en total fueron veinte minutos y seis canciones, esperamos que a la próxima hayan superado carencias
segundo lugar para unas más que sorprendentes mika miko. cuatro señoritas y un señorito a la batería. nos hicieron recordar el grrl power con esas canciones tan punks y garageras a la vez. se iban turnando las labores de instrumentación a la vez que se pasaban ese gracioso teléfono rojo con el que mandaban mensajes ¿al público? ¿a sus novietes?
con el hecho de que las dos actuaciones anteriores se adelantaran tanto (¿o es que se quedaron muy cortas?) hubo que esperar algo así como una hora para ver en escena a boss hog. jon spencer y cristina martínez salieron a escena acompañados de otros tres músicos para poner en práctica el poder destructivo de esa máquina para crear perlas de blues que el primero tiene. ella era todo pecado, sobre todo ese pantalón de vinilo negro, y él todo actitud y derroche de clase para una actuación que no podía dar más de sí. a ver si ahora se deciden y sacan otro disco pronto...
(12twelve: adiós al free)
cambio de ubicación, la segunda parte de la noche estaba en la sala el sol.
empezaron the joe k-plan atormentando el personal a base de puñetazos en la cara. ¿era hardcore? ¿era punk? ¿era experimentación? lo único que sabemos es que era una música endemoniada y todo poderosa sólo con guitarra y batería. enfermizos, frenéticos, dándolo todo... una pareja a la que habrá que tener muy en cuenta a partir de ahora en esto del underground
luego les tocó a (lô:muëso). algo anodinos en un principio pero poco a poco fueron calando con esos desarrollos de post-rock y algún que otro ramalazo hardcoreta. presentaban los temas de su disco de 2008, giant catarzee. aunque podrían haber estado mejor ubicados al principio, acabaron dejando una sensación como de que habrá que darles una segunda oportunidad
y el final, nunca mejor dicho, para 12twelve. eso de que tocaran a las doce y pico del doce del doce ya hacía presagiar algo... y así fue: este concierto supuso el último para el grupo después de diez años. asumido el bajón provocado por la noticia, ahora les tocaba a ellos echar el resto. como ya me habían avisado (yo era la primera vez que los veía) siguieron por esa vereda de free jazz tan innovador que les ha marcado en la última época y que a un sector del público parece encantarle. adiós
uy, que maratón (nunca mejor dicho) de conciertos...
ResponderEliminara ver de hoy que nos cuentas..
buen comienzo. y eso que, a priori, el jueves parece el día menos apetecible.
ResponderEliminarlo de hoy es de vértigo.