podemos llegar a jeremy jay por la conexión con los primeros go-betweens, por ser el último descubrimiento de calvin johnson y pertenecer al catálogo de k records, por su actuación en el southpop onubense o incluso por una entrevista que jesús llorente le hace en la rockdelux de noviembre. podemos llegar a él por múltiples vías, pero lo cierto es que siempre vamos a terminar enamorados de este californiano delgaducho y desgarbado. enamorados de este músico de sala de estar y emoción contenida. enamorados, claro, de un disco que tiene la marca del sello donde se ha publicado; amateurismo, inspiración y emotividad en cantidades desorbitadas.
jeremy jay recuerda a robert forster al cantar, a david bowie al componer, a calvin johnson al grabar sus canciones (no en vano ha sido el productor del disco) y a daniel bejar al hacer los estribillos. recuerda a todos ellos y no como una réplica vacía, sino como un catálogo de referencias a las que hace honor con este impresionante a place where we can go, que se convierte en la mayor sorpresa de este año. un disco que podría estar grabado en un cuarto de baño o en una iglesia de grandes bóvedas, donde vuelve a primar la austeridad instrumental (parece que ya no está de moda sobrecargar las canciones) para buscar la esencia en cada canción. que arranca de forma inmejorable con un heavenly creatures que toca fibra y no baja nivel en ningún momento.
no nos gusta precipitarnos (aunque lo hacemos) y por eso cuesta desplegar adjetivos. no parece normal eso de mirar atrás y darse cuenta de que hemos dicho nosécuántas veces eso de disco del año, pero tampoco es sencillo controlarse cuando en el reproductor está sonando someone cares y en la cabeza revolotea hunky dory como si el mejor bowie estuviera dando su beneplácito. no queremos dejarnos llevar por la emoción del momento y por eso vamos a dejarlo en que jeremy jay se merece la mayor de las atenciones con este a place where we can go, cargado de grandes canciones. decidir en lo que finalmente se convertirá el disco es algo para lo que vamos a darle más tiempo, el que sea necesario.
19/11/08
a place where we could go, jeremy jay (k records) 2008
Etiquetas:
discos,
manolodominguez
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a mi me ha enamorado por completo este disco.
ResponderEliminarel ambiente que se respira sobre todo y las canciones, claro.
no sabría con cual quedarme, es un todo..
a mí me hace tilín también... ummm, y de canciones me quedo con leave the scene behind
ResponderEliminarvaya, nadie pilló mi ironía...
ResponderEliminares que por internet los textos irónicos son muuuuy peligrosos. pero sí, todos queremos a jeremy jay, por supuesto.
ResponderEliminarno, nada que ver, la cosa es que había puesto un título de una canción de (ejem) the wave pictures
ResponderEliminarjo, pues no me había fijado en el nombre de la canción.
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