hablar de the bats no me resulta sencillo. una banda histórica del pop, no solo neozelandés, con casi treinta años de existencia, y que yo descubrí hace apenas tres o cuatro. algo así como decidir la evolución de una lesión sin revisar el historial o pensar que la discografía de the go-betweens empezaba con friends of rachel worth. toda una temeridad.
así que, aunque obviamente he ido investigando sobre ellos desde que los escuché por primera vez y por suerte o por desgracia hoy es mucho más sencillo acceder a casi cualquier música, no voy a comparar este álbum con los anteriores, sino justificar por qué es uno de los discos que más me apetece escuchar últimamente. porque free all monsters, lo último de la banda liderada por robert scott, es un pequeño regalo de pop reposado y elegante que nace sin la presión de las modas ni las tendencias. parece poco ambicioso en las formas y, sin embargo, es brillantísimo en el fondo. cada canción del disco te evoca el mejor indie pop de los ochenta, el que elaboraron por ejemplo sus vecinos lennan y forster, y lo hace con la tremenda seguridad de que no cae en el remedo de tiempos pasados, obviamente por el poso que tiene la banda tras treinta años en los escenarios. consigue convencernos con argumentos parecidos, explicados de diferente forma, a los que hacen que el disco de the ladybug transistor sea uno de nuestros preferidos del año, y tiene una especial facilidad para convencer sin aspavientos.
escuchándolo ves como uno tras otros van pasando los temas (long hands, simpletons, free all monsters…) y vas dándote cuenta de que ninguno flojea, que todo es excelente. y yo, que soy así de absurdo, me alegro por mí y por lo que estarán sintiendo fans de pro como ignacio al escucharlo. esa gente que hace años me convencieron de que el mejor pop anglosajón no tenía por qué salir necesariamente de las islas británicas.
24/10/11
free all monsters, the bats (flying nun) 2011
Etiquetas:
discos,
manolodominguez
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Yo también los descubrí hace unos tres años. Tuve la suerte de verlos en directo y me gustaron.
ResponderEliminarLa verdad es que este disco ha sido como un regalito caído del cielo que me ha encantado.
Pues sí, disfrutándolo a tope desde el otro lado del mundo. Son únicos.
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