Se ha hecho de rogar. Ha tardado casi cinco años en volver a visitarnos. La última vez que Sufjan Stevens estuvo en nuestro país fue el 7 de noviembre de 2006, también en Barcelona, bien cerca del recinto del Fòrum, el Casino de L´ Aliança de Poble Nou. En esa ocasión ya nos dejó con la boca abierta. Allí hubó supermanes y papa noeles, alas, euforía y emoción. Pero entonces, volvió. Y el mundo se paró justo durante dos horas y diez minutos (la actuación más larga del festival, creo).
Tras el despropósito del sistema ideado por el festival para la entrada en el Auditori para cada uno de los dos días que Sufjan actuaba (totalmente eclipsado por la música, como una vez más en este tipo de citas), servidor consiguío un ticket para el concierto del jueves 26 (cuentan por ahí que apenas hubo diferencias en ambos conciertos).
Creo que el concepto de concierto debería cambiar desde ya mismo. La vida sería mucho mejor si pudieramos disfrutar de espectáculos como el que Sufjan Stevens nos ofreció más a menudo. Toda una celebración de las canciones, de la vida, del universo. Sufjan no plasma las canciones en directo, las transforma una a una en una fiesta absoluta para disfrutar como si fuéramos niños pequeños.
Una fiesta en la que cabe de todo: alas gigantes como las que todos querríamos llevar siempre, fosforitos luminosos, pelucas, máscaras, pelotas gigantes de colores, cualquier cosa que nos haga sonreír. Porque creo que no solo habría que redefinir el concepto de concierto, también el de la emoción. La vida ya no es igual tras el jueves. Ha cambiado. Es otra.
Sufjan se centra en la presentación de The Age of Adz, adentrándonos de lleno en él: ideas, el arte (hace especial incapié al profeta Royal Robertson, algunas de sus ilustraciones forman parte del álbum), todo lo que lo rodea.
Solo Sufjan es capaz de cambiar de climax (más de una vez) y llevar el concierto donde él quiere. De las desarrolladas Too much y The age of adz pasamos a la austera versión de The One I love de Rem. Solo él es capaz de hacer durar una canción 35 minutos y que no tengamos bastante. Fue Impossible soul, la mejor canción del de Michigan, la canción que hizo desatar la alegría y las emociones de todos los que estábamos allí, todo eso que se puede sentir en uno de los que sabes, será uno de los recuerdos destacados de tu vida. Solo Sufjan es capaz de hacerme temblar a estar a escasos dos-tres metros de su presencia, que no es humano.
Que el mundo es mejor ahora. Que Dios bendiga a Sufjan Stevens.
31/5/11
conciertos destacados del primavera sound 2011 (el de javi): sufjan stevens
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Tengo las sensaciones encontradas de que fue algo grande pero que me perdí algo que quizá no me apetecía tanto ver...
ResponderEliminarpienso igual que tú. el último disco de sufjan no me convenció, y seguramente el concierto, que parece que se centró en él, tampoco me llegase. pero aún así me parece que me perdí algo especial.
ResponderEliminarpero vamos, que los festivales tienen estas cosas. me perdí a sufjan, tennis, fresh and onlys, monochrome set, flaming lips... no se puede estar a todas.
Perezón todo.
ResponderEliminarY encima Google me impide registrarme con mi nombre.
Un saludo,
Federica Pulla
Estuve en el del viernes y no recuerdo que hiciese ninguna versión de REM: ¡qué rabia!
ResponderEliminarA mí tambien me daba un poco de miedo este concierto, visto que el repertorio iba a estar basado en The Age of ADZ, pero fue espectacular total: dos horas de concierto que no se hicieron para nada largas.
Me da la impresión que el concierto del jueves estuvo mejor que el del viernes o al menos que la participación del público fue mayor. Excepto por las dos últimas canciones en las que nos acercamos a bailar cerca del escenario, la única vez que Sufjan solicitó nuestra participación haciendo unos coros fue un verdadero desastre, ya que al final nadie se lanzó o al menos no se escuchó. Yo lo achaco a ese horario tempranero del "pase" del viernes.
PS: me estuve encontrando con ustedes a lo largo del festival -Dotore, Espanto, Javiera Mena,...-, pero mi naturaleza tímida hizo que en ningún momento me atreviese a dirigirles la palabra. Bueno,en el principio de la firma de Nosoträsh en el stand de Elefant,hablé un segundo con Manolo mientras él pedía el máximo de copias posibles del vinilo....pero no era el momento adecuado.
Luis
nosotros nos acercamos al escenario al poco de empezar Impossible Soul (de ahí que pudiera hacer esta foto y otras) y yo más nervioso no podía estar de tenerlo justo enfrente.
ResponderEliminarA mí la que me dió rabia perderme fue Concerning the UFO Sighting Near Highland, Illinois, que el jueves no la hizo y es de mis preferidas.
No te creas, a mi también me pasa eso constantemente. Por mi vergüenza y timidez siempre dejo de saludar...algo habrá que hacer para que superemos eso
qué bien suena todo! esperemos que no vuelvan a pasar 5 años para tener a sufjan por aquí.
ResponderEliminarCierto lo de Concerning the Ufo... Superbonita le quedó. Además es una de las preferidas de la persona con la que iba. Que por cierto tuvo un pleno puesto que, tanto Low con Sunflower y PJ Harvey con Meet ze Monsta, le cantaron sus favoritas.
ResponderEliminarY con la timidez, poco se puede hacer. Solo darles las gracias por descubrirme tantas cosas buenas, tan bien expresadas y con tanta pasión.
Luis
Consiguió hacer un concierto entretenido con un disco tan empanado como "Age of Addz".
ResponderEliminarEse es mucho!