we once wished, ainara legardon (winslow lab) 2011

más bien poco, por no decir prácticamente nada, hemos hablado en la página de la nadadora de la trayectoria de ainara legardon en solitario. pero uno escucha este cuarto disco de la vasca, ya asentada en madrid, y pronto se da cuenta de lo mucho que se ha perdido por no haber estado atento a discos como in the mirror (2003), each day a lie (2005) o forgive me if i don’t come home to sleep tonight (2009), sus otras tres patas para el banco que ahora completa y asienta definitivamente con este we once wished que ahora nos ocupa

ainara legardon se aleja cada vez más del folk-rock americano que empañó sus dos primeros discos y se centra en dar crudeza y realidad a un trabajo que, como ya ocurriera en el anterior, explora en las raíces del rock más árido y anguloso. en we once wished asistimos a todo un tratado de guitarras afiladas y llenas de matices que se combinan junto con la cada vez más portentosa voz de ainara en un disco que supondrá todo un hito en la trayectora de esta peculiar cantautora: denso, árido y en ocasiones difícil de escuchar, como las grandes obras del rock

su valentía y su trabajo la han llevado a crearse un más que encomiable papel de investigadora en esto del rock y por eso ha llegado a parir un trabajo como we once wished, donde la aridez de canciones como i left o evil eyes, la gravedad de otras como you gave me o thirsty o especialmente la dureza en plan lisabö de before waking up, sin duda la gran cima del disco, campan a sus anchas en uno de los discos más interesantes que el rock nos ha dado dentro de nuestras fronteras en los últimos años. ainara lo ha conseguido, pero lo mejor de todo no es eso, sino más bien que parece que su camino sigue en trayectoria ascendente para convertirse en una de las damas del rock del siglo xxi