festivales: primavera club madrid 2010, sábado 27 de noviembre

el sábado del pclub se me hizo un tanto extraño y cuesta arriba ya desde el principio. lo primero que hice fue ir al neu! a ver a yuck, un cuarteto británico del que se ha hablado mucho teniendo sólo una maqueta publicada, absolutamente nada en el mercado. a los cuatro de londres (ojito al pelazo del batería) les queda un camino muy largo por andar, eso está claro viendo sus carencias, pero quizá apunten alto mirando con el mismo visor a teenage fanclub y dinosaur jr, aunque la verdad, por momentos se me hacían los más criticados australian blonde. volveremos a hablar de ellos si es que se lo montan bien y saben dar los pasos certeros
después estuve en la lejana rock kitchen, de la que nos habían dicho que el sonido era nefasto. allí abrieron la tarde los catalanes fred i son (en la foto), que para un público bastante escaso lo dieron todo con su encantadora simpatía y una sencillez de esas que hacen grandes a una banda. las canciones de su debut son enormes, mucho más aún con la incorporación de cristian pallejá, y eso lo demuestran de la mejor posible de las maneras. y si encima lo aderezan con perlas como un tema inédito, otro en castellano y una versión en catalán de vainica doble, el resultado les queda por lo menos de nueve. después le tocó al ex-líder de the czars, john grant, un cantautor norteamericano de esos que te ponen los pelos de punta ya desde la primera nota de su show. preciosas canciones, impecable puesta en escena y una voz portentosa donde las haya que hicieron de la presentación de su queen of denmark una cita perfecta en la que destacaron entre otras it’s easier o where dreams go to die. un show emotivo y arrollador de manera totalmente inesperada. pasadas ya las diez, se subió al escenario el mito viviente de edwyn collins, pero no sé si fue el verlo salir al escenario tan ajado con su bastón o el comprobar que en algunas notas de su primera canción ya no llegaba, que me fui pensando que igual era mejor no recordar al que fuera líder de orange juice de una manera que me pudiera doler

así que me fui rápido hacia el círculo de bellas artes, donde llegué a la mitad del dúo smoke fairies, una suerte de folk demasiado ortodoxo de ese que al menos sirve para epatar pero que quizá no encontró su lugar en la cercanía a la medianoche. muchos, demasiados quizá, guiños a vashti bunyan sin gracia en un continuum bastante deslucido de canciones que parecían siempre la misma. estaba claro que todos los allí presentes estábamos esperando a teenage fanclub y que todo lo demás era un simple aderezo. los escoceses salieron a la sala de columnas más o menos puntuales y conocedores de que lo que allí les esperaba era un baño de multitudes (de todos los que pudieron entrar, se entiende). empezaron con start again y terminaron son un bis que incluía the concept y everything flows. aunque ellos venían a presentar shadows, su destacable disco de 2010, se dejaron llevar por su arsenal de hits y por una presencia arrolladora que les hace ser muy grandes sin pretenderlo. las tres veces que los he visto me han parecido que han dado el concierto perfecto: inmaculados, acertados y siempre correctos, señas de identidad de unos escoceses que si no tienen ganado ya el cielo es porque no quieren. me quedé tan satisfecho que decidí que, tras coprarme una camiseta suya, mi primavera club 2010 acababa ahí