segunda jornada southpop, 27/03/2010, sevilla

el segundo día del south pop arrancó con el nuevo fichaje del sello sevillano. nitoniko citaba el tontipop como homenajeado en uno de sus temas, y es seguro que alaba a bandas nacionales como astrud o ellos, pero su puesta en escena nos los deja más cerca de propuestas más comerciales como dorian que de cualquiera de estos. coreografías modernas y una presentación a la que aún le falta un hervor. e incluso así, no tenemos claro a dónde pretenden llegar, si a ser portada del rockdelux, de jenesaispop o del superpop. lo importante es que lo tengan claro ellos.

lo de exsonvaldes fue muy diferente, aunque para mí tampoco del todo convincente. ellos andan a medio camino entre el powerpop clásico de posies o teenage funclub y el nuevo indie de, por ejemplo, franz ferdinand. a mí no me llegó el concierto, es cierto, pero sí se notó lo contrario con gran parte del público. pueden tener tirón porque mimbres parece que hay.

de punsetes poco puedo decir que no se haya dicho ya. sin duda son el grupo indie nacional del año. empiezan a sumar portadas y llenazos, su disco es una pasada y tienen personalidad y un directo que pone los pelos de punta y destroza los tímpanos. camisetas de los ramones, belleza interior, dinero, exabruptos y una gloriosa interpretación enlazada de cien metros para el cementerio y por el vicio que congeló el teatro alameda. habrá quien lo consiga, pero no es fácil salir indemnes de ellos. a mí me arrancaron las tripas.

y después de semejante concierto, lo de hidden cameras solo sirvió para volver a la normalidad. hidrogenesse pueden ser fans y todo lo que quieras, pero de una banda a la que llevo casi una década dándole oportunidades en balde, ni esperaba ni logré mucho. ese medio camino entre lo hortera, la costa este y la comedida oscuridad de otros visitantes anteriores a la ciudad como black heart procession o piano magic solo consiguió dejarme precisamente a medio camino de todo. no voy a decir que fuera un mal concierto, pero sí que a mí me sobró.

y el fin de fiesta no me aportó mucho más. a la larga puedo considerarlo el segundo concierto que más difruté del día, sí, pero tampoco es que fuera para tirar cohetes. zombie zombie son de gustos germanófilos y no lo esconden. el krautrock electrónico de este dúo tiene su gracia, pero sus canciones de diez minutos con menos variaciones que el hallogallo de neu! o lo más atmosférico del space rock tienen ya poco de sorprendente o emocionante. quedaron como una anécdota que no sirvió más que para no quedarme con el oasis punsetiano.

y es una pena, porque el balance musical del festival no puedo decir que sea negativo, pero la distribución de los grupos por días hizo que me yo fuera viniendo abajo poco a poco. eso y que después de lo de los punsetes dediqué todo mi esfuerzo a recolocar cada órgano interno en su sitio.