survival strategies in a modern world, liechtenstein (fraction discs/slumberland) 2009

al final no es tal como lo esperaba. llevaba unos meses enganchado a sus tres eps previos (dos en 7” y un tercero en cdr) y había puesto todas mis esperanzas en el álbum con el que liechtenstein iban a debutar a medias entre fraction discs y slumberland. les había regalado el título de salvadores del pop antes de tiempo.

y el disco llegó y creo que cubre muchas expectativas, pero en un principio no pensé que aportasen nada nuevo a lo ofrecido anteriormente y, lo que es peor, noconseguía que me enganchase a él sin reservas. pero no hay que engañarse como yo lo he hecho. la culpa de esta seudodecepción ha sido solo mía por imaginarme lo que no es. porque ahora que ya ha pasado más de un mes desde la primera escucha, poco a poco empiezo a bajar de mi limbo particular y, por fin, consigo disfrutar del interesante debut en formato grande (o mediano, ya que lo han planchado en un 10") de la banda sueca.

escuchándolo hoy, las nueve canciones de survival strategies in a modern world, editado en cd y vinilo, ya no solo las encuentro absolutamente coherentes con lo ofrecido anteriormente, sino que incluso me atrevería a decir que no bajan el nivel con respecto al material previo publicado; pop de influencias claras que no se pierde en ñoñerías, compuesto e interpretado de manera inmaculada. by staying here es adictiva desde la primera escucha, all at once suena a clásico indie de los ochenta, roses in the park explota la comunión shop assistants-phil spector a la perfección y todo el conjunto tiene un aire indiscutible a disco de género sin caer en la simpleza.

ha pasado un mes desde el primer porrazo, tal vez dos, y bastantes reproducciones en mi casa. y ahora mientras escribo esto lo que no tengo claro es qué es lo que yo esperaba de liechtenstein para que laprimera impresión me pesara tanto y no me dejase disfrutar del disco. la mente, que a veces es excesivamente caprichosa y se pierde en subjetivismos que no son ni coherentes ni razonables.

pero, por suerte, al final el tiempo y los domingos de vinilos van situándolo donde se merece y donde debe estar. ni tan alto como yo pensaba ni tan bajo como cayó cuando me lo encontré filtrado a finales de abril (como siempre bastante antes de la fecha de publicación) y lo puse por primera vez en mi casa con demasiada ilusión, infantil, innecesaria y desaconsejable.