empecé a escuchar este disco con el escollo de que continental 62 me parecía tremendamente mejor que tu labio superior, un trabajo en la carrera de christina rosenvinge que siempre vi como menor dada la extraña e innecesaria amalgama de heterogeneidad, y que lo sigo viendo así. después de oír con detenimiento (he ahí la clave) la joven dolores, la verdad es que pronto te das cuenta de que sin tu labio superior este disco probablemente ni hubiera llegado a existir, pero que todas las carencias de aquel, que las tenía, se ven subsanadas en este espectacular nuevo discoindudablemente christina rosenvinge ha llegado con la joven dolores a su cima como cantante y como compositora, con unas canciones sobresalientes, que ha creado gracias unas letras en las que la vemos desenvolviéndose de manera totalmente cómoda y unas preciosas melodías que lo hacen todo mucho más llevadero. a la madrileña le ha sentado fenomenal el viaje en el barco ‘la joven dolores’, algo que nos hace afirmar con creces tras escuchar este nuevo disco
con un comienzo magistral del disco como es canción del eco, con una colaboración preciosa de georgia de yo la tengo, y seguida de otras dos excepcionales como son eva enamorada y mi vida bajo el agua, la joven dolores irrumpe en nuestros sentimientos jugando a destrozarnos y haciéndonos cómplices de un humor peculiar parte del que podríamos llamar universo rosenvinge, una fantasía en tonos sepia donde la melancolía y los medios tiempos lo inundan todo. el disco también tiene otros momentos álgidos como la idiota en mí (mayor), en la que colabora benjamin biolay, y que ya conocíamos desde hace unos meses pero que no pierde ni un ápice de frescura, la noche del incendio, probablemente la mejor canción del disco (¿incluso de la carrera de christina?) o debut, el cierre perfecto para un trabajo perfecto
casi sin hacer ruido, christina rosenvinge se ha vuelto imprescindible en las primeras semanas de 2011, con un trabajo que la eleva hasta un punto que hace unos meses casi no podíamos imaginar
Espectacular y emocionante.
ResponderEliminarSí, son dos palabras que complementan lo que digo del disco a la perfección.
ResponderEliminaryo aún lo veo un escalón por debajo de sus dos anteriores, pero es que yo sí fui muy fan de tu labio superior y su heterogeneidad. eso sí, lo tengo recién salido del horno, como quien dice.
ResponderEliminaryo aún no lo he escuchado, pero echo mucho de menos el Que me parta un rayo. Sé que no volverá, pero cada vez que la oigo no puedo hacer otra cosa que pensar en Señorita*.
ResponderEliminaryo, la verdad, también echo de menos a esa Christina de Que me parte un rayo, pero eso no quita para que disfrute también a esta Christina.
ResponderEliminarY este disco me parece enorme!